LA HABANA, 18 (AP) - Diego Maradona llegó hoy a Cuba para librar aquí una nueva batalla contra su adicción a la cocaína, que lo tuvo al borde de la muerte hace dos semanas.
Maradona llegó al aeropuerto de La Habana en un vuelo de la areolínea Cubana Aviación, luego de una escala en Holguín. En algún momento se especuló que se quedaría en esa capital provincial para recibir tratamiento, pero el argentino siguió
el vuelo hacia La Habana.
El ex futbolista vino acompañado de sus médicos, su esposa, sus padres y su amigo y representante Guillermo Cóppola.
El médico personal de Maradona, Alfredo Cahe, no reveló dónde exactamente se internará el ídolo. Sólo dijo que lo haría en una clínica de La Habana. Tampoco indicó cuánto tiempo permanecerá allí.
Maradona sufre de una grave insuficiencia cardíaca provocada por su adicción a la cocaína y debió ser internado de urgencia en una clínica hace dos semanas en Punta del Este, Uruguay. Una vez superada la crisis, fue trasladado a otra clínica de Buenos
Aires.
Sus médicos recomendaron que se sometiese a un tratamiento de rehabilitación fuera de la Argentina, en lo posible en Canadá o Estados Unidos.
Maradona contempló la posibilidad de efectuar su rehabilitación en Boca Ratón, estado de la Florida, pero tiene prohibido el ingreso a Estados Unidos por sus problemas legales relacionados con la droga y no pudo obtener ayer la visa ``humanitaria'' que hubiera necesitado
porque el feriado norteamericano en memoria de Martin Luther King mantuvo cerrada a la embajada de los Estados Unidos.
Optó entonces por viajar a Cuba.
Maradona fue trasladado desde el sanatorio en una ambulancia, seguida por un vehículo con equipo cardiológico de emergencia. Lo siguió una nutrida comitiva de vehículos de periodistas y reporteros gráficos, así como automóviles particulares con
fanáticos del jugador.
Cuando la comitiva llegó al aeropuerto, la ambulancia ingresó a la pista dirigiéndose hasta el lugar donde estaba estacionado el reactor de Cubana. Pero la deficiente vigilancia permitió que numerosos reporteros gráficos y simples particulares invadieran la
pista y llegaran hasta la escalerilla del avión.
La Policía Aeronáutica, dependiente de la Fuerza Aérea, procedió a desalojar a los intrusos, lo que provocó algunas escaramuzas.
Entretanto, otro grupo de periodistas rodeaba a los ancianos padres de Maradona, que realizaban los trámites de embarque. Ambos permanecieron en silencio y evidentemente confundidos por el alboroto.
El doctor Cahe dijo a la prensa que la decisión de viajar a Cuba la había adoptado él juntamente con la familia de Maradona. ``El (Maradona) tiene muchos conocidos en Cuba y me puso en contacto con el comandante Eduardo Ordaz, que dirige el Hospital Psiquiátrico de La
Habana'', dijo el médico.
Cóppola dijo que viajaba ``porque me lo pidió Diego y también lo aconsejó el doctor Cahe''.
El representante de la medicina cubana en Buenos Aires, José Antonio Veiga Zamora, declaró a la prensa que ``nosotros hicimos todo para que Maradona viaje a nuestro país. Nuestros colegas en la isla organizaron el tratamiento. Es posible que se traslade directamente al
Hospital Psiquiátrico, pero nosotros le recomendamos que primero vaya a otro centro de salud''.
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