Gran Maestro
de la masonería cubana ataca a la prensa independiente
Rafael Pérez, AFPCP
LA HABANA, marzo - En un acto masónico celebrado el 7 de marzo con
motivo del aniversario de la Respetable Logia Cosmopolita, en Ciudad de La
Habana, todo transcurrió en un ambiente fraternal hasta que el Gran
Maestro de la masonería cubana, ilustre hermano José Manuel
Collera Vento la emprendió contra los periodistas independientes.
Collera Vento, después de expresar que la arterioesclerosis lo
afectaba frecuentemente debido a su edad, acusó de traidores a la
institución a los hermanos masones que ejercen el periodismo
independiente.
Al parecer, el gran funcionario olvidó que en mayo del 2000 concedió
una entrevista al señor Pedro Nasco, de la UPECI, quien es maestro masón.
La obra masónica es esencialmente una obra de pensamiento / UPECI
Si como expresó el Gran Maestro las agencias de prensa independientes
son mentirosas y faltas de profesionalidad, entonces la entrevista que le hizo
Nasco tendría las mismas características.
Dijo el Gran Maestro además que esos hermanos (los masones que son
periodistas independientes) levantan calumnias sobre la masonería.
Pero este aspecto se puede contestar con el argumento irrefutable de que el
principal propósito de la masonería es "desenmascarar al hipócrita",
"enseñar al ignorante" y abatir al ambicioso" y que todo
lo que denunció la prensa independiente respecto a las elecciones masónicas
en las que salió electo el hermano Collera Vento, es real, y que esas
informaciones se fundamentaron en los testimonios de otros hermanos que
estuvieron al tanto de la urdimbre que se creó en torno al proceso
electoral donde masones inescrupulosos manipularon sutil y sórdidamente
el asunto.
Quizás el Gran Maestro consintió en llevar un cargo que pesa
mucho en sus espaldas. No obstante, en este caso cabe aplicar la enseñanza
del refrán: Dime con quién andas, y te diré quién
eres, porque en su gabinete el más alto funcionario de la masonería
cubana se rodeó de hermanos que por su condición moral dejan mucho
que desear.
En aquel momento no se habló de secretos masónicos, sino que
se denunció la manipulación de que fueron objeto las elecciones.
Todo aquél que ame la institución masónica no puede
permanecer impasible ante personas que históricamente han sido traidores
a sus hermanos. Y si el Gran Maestro los acoge en su gabinete, podemos pensar
entonces que: o se abusó de su buena fe o su actuación no está
acorde con los principios de la masonería.
Con discursos triunfalistas y ocultando las verdades y las malas actuaciones
no se es mejor masón, sino un individuo que escogió la mentira y
que hace mucho daño a la institución de la escuadra y el compás.
Piense el Gran Maestro que algunos de sus asesores no son bien vistos por la
generalidad de los hermanos de la fraternidad y no se acuse irresponsablemente a
aquellos que, al menos, hacen algo por denunciar la arbitrariedad no sólo
en el seno de la masonería, sino en el país. La hipocresía
hay que desenmascararla.
Nuestro hermano y Apóstol José Martí dijo: "Los
flojos respeten, los grandes adelante, ésta es tarea de grandes".
Así, el que no sea capaz de enarbolar nuestros principios que al
menos se calle y no ataque a quienes tienen el valor de decir la verdad.
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