Las delicias
de La Delicia
Héctor Maseda, Grupo Decoro
LA HABANA, mayo (www.cubanet.org) - La conducta que asume el gobierno cubano
de entregar obras sociales sin concluirlas provoca incrementos en la inversión
final y el acabado deficiente de las mismas.
Tal es el caso de la comunidad campesina La Delicia, ubicada en la provincia
de Cienfuegos. Los apartamentos fueron entregados por el gobierno cubano en
julio de 1999 sin que aún estuvieran terminados los trabajos de
urbanización y servicios necesarios.
Un vecino de la comunidad se queja: "Llevamos tres años viviendo
aquí y muchos de nosotros no poseemos los documentos que nos acrediten
como propietarios y no sabemos siquiera si algún día concluirán
los trabajos que faltan: pavimentar las calles y aceras, el alumbrado y
organizar el transporte público, que no existe. Y como no somos
residentes legales, pues el traslado de la libreta de abastecimientos no se
puede hacer. El Poder Popular conoce de esta situación y la respuesta es
la misma siempre: no tenemos orientaciones sobre el asunto".
Otro residente del vecindario se refiere a las dificultades que confrontan
en el interior de sus hogares: "Los apartamentos del primero y segundos
pisos tienen goteras y algunos vecinos han tenido serios problemas eléctricos
porque el agua penetra por las paredes y pasa por las tuberías plásticas,
registros y toma-corrientes. Los marcos y las puertas están en mal estado
y amenazan con desplomarse. Vivimos en pocilgas rodeados de mierda por todas
partes. Cuando el gobierno se decida a reparar y construir lo que falta tendrán
que invertir cuatro o cinco veces lo que les constó levantar esta
comunidad".
Esta experiencia la sufrimos los habaneros hace varias décadas con el
reparto Alamar, en la Habana del Este. Cuando se inauguró, los dirigentes
que asistieron al acto plantearon que allí residirían cientos de
miles de cubanos porque Alamar sería el principio de una gran obra que se
extendería por la costa norte de la provincia hasta llegar a las playas
del este.
La construcción de las obras sociales en Alamar, salud, educación,
comunales, abastecimientos, áreas de recreación, demoraron años.
Aún existen zonas donde las calles no se han pavimentado, no tienen
aceras. Alamar fue rebautizado por sus moradores como la "Siberia
capitalina".
Los vecinos de "La Delicia" denominan a su comunidad como "La
Desdicha".
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