Resumen del desastre del
huracán "Charley" en Cuba
Martinoticias.com.
18 de agosto del 2004.
El paso del ciclón "Charley"
ha dejado a miles de cubanos sin casa y a decenas
de miles sin agua, luz, teléfono o gas
en La Habana, y en otras regiones occidentales,
que tratan de recuperarse lentamente del zarpazo
del huracán.
"Charley" dejó un saldo de
cuatro muertos, más de 200 mil damnificados
y unas 40 mil casas destruidas o dañadas
a su paso en la madrugada del pasado viernes por
Cuba. Los daños están siendo reportados
periódicamente.
La zona occidental de La Habana y las costeras
del sur, como Batabanó y la Playa Cajío,
fueron las más afectadas por el huracán,
que cruzó la isla con vientos de hasta
200 kilómetros por hora.
"La cosa está mala", "La
Habana está en candela (destrozada)",
son algunas de las frases que más se escuchan
en estos días en la capital cubana.
En Villa Clara, región central, así
como en otras localidades de la isla, por donde
no pasó el ciclón, la población
se quedó varios días sin electricidad
y agua. Y los prolongados apagones siguen repitiéndose.
Decenas de miles de personas cumplieron su quinto
día sin luz, ni agua; miles tampoco tienen
teléfono ni gas y muchos en los barrios
del oeste han optado por instalarse en las azoteas
para hacer frente al calor.
Los habituales apagones que sufren La Habana
y otras ciudades y pueblos de la isla - desde
hace tiempo - han acostumbrado a sus vecinos a
la falta de luz, pero la escasez de agua se está
convirtiendo en uno de los problemas más
graves. Antes del paso del huracán, más
de 100 mil habaneros se abastecían con
"pipas" (camiones cisterna).
La empresa Aguas de La Habana llamó a
la población a ahorrar ante la imposibilidad
de restablecer el servicio con normalidad. Las
fuentes abastecedoras de la Cuenca Sur, la receptora
de agua más importante de La Habana, presentan
averías en subestaciones de bombeo. El
último ciclón derribó unos
100 postes de suministro eléctrico a las
estaciones de bombeo de agua de la Cuenca Sur.
La gente se queja de que no hay agua para tomar,
y que la falta de luz echa a perder los alimentos
y no pueden cocinar, porque no tienen gas. Hay
familias que duermen desde el sábado en
las azoteas de sus casas en Arroyo Arenas, en
el oeste de La Habana, porque, según dicen,
es la única manera de aguantar el calor.
Martinoticias.com
- Office of Cuba Broadcasting
|