Crónica           IMPRIMIR
30 de enero de 2008

Dos notas sobre el aniversario de la visita del Papa, enviadas desde la cárcel
Juan Pablo II en Cuba

José Daniel Ferrer García, prisionero de conciencia

PRISIÓN PROVINCIAL DE GUANTÁNAMO, Cuba, enero (www.cubanet.org) - Han pasado 10 años. Los católicos cubanos y el pueblo en general vivimos momentos inolvidables durante la visita de Su Santidad Juan Pablo II a la Isla. Un hombre extraordinario, un hombre de Dios comprometido con la defensa de los derechos humanos, la paz y la justicia.
   
Sus discursos y homilías durante aquellas intensas jornadas resultaron novedosas para un pueblo cansado de la retórica del régimen. Fueron mensajes llenos de esperanza y amor. Sabias palabras que quedaron grabadas en las mentes y los corazones de los cubanos.

Recuerdo haber leído que en visitas a su tierra natal, cuando estaba bajo el yugo comunista, preguntó a los polacos: “¿A favor de qué están ustedes? ¿Conformes con la coalición totalitaria o con el derecho inviolable en el orden de cosas establecido por Dios y el hombre para que los seres humanos vivan en la libertad y la dignidad?”. Sus compatriotas estaban en favor de lo segundo. Unos años después lo dejaron bien claro en elecciones libres.

A los cubanos también nos habló de la necesidad de defender los derechos humanos, la democracia, el pluralismo, la justicia social. A todos nos tuvo presente y nos invitó a construir una sociedad nueva, libre, solidaria, fraterna. Nos habló sobre el protagonismo que debíamos asumir en todos los sectores de la vida social; con amor y responsabilidad. Sobre el valor de la virtud, la importancia de la familia y su misión educativa.

Exhortó a los jóvenes a ser fuertes y audaces, a buscar la felicidad desde el sacrificio y el compromiso con la verdad y la justicia. Se despidió confiado en que sabríamos, fe, edificar un futuro mejor para todos.

Diez años han transcurrido desde esa histórica visita. Juan Pablo II falleció sin ver las profundas trasformaciones que necesita nuestro país y que tanto él deseaba.

Desde la prisión Provincial de Guantánamo, el prisionero de conciencia José Daniel Ferrer García, miembro del Movimiento Cristiano Liberación y gestor del Proyecto Varela.

 

Loas a su santidad Juan Pablo II en el X aniversario de su visita a Cuba

Juan Carlos Herrera Acosta, prisionero de conciencia

PRISIÓN PROVINCIAL DE HOLGUÍN, Cuba, enero – En el décimo aniversario de la visita a Cuba de su Santidad Juan Pablo II, recordamos su célebre frase: “No tengan miedo”.

Fue un desafío a la dictadura castrista y un reto para los cubanos. Nosotros desde la oposición pacífica, hicimos nuestro aquel memorable e histórico acontecimiento.

Han pasado diez años y sin embargo el régimen cubano no ha avanzado en la democracia y el respeto a los Derechos Humanos, aspectos permanentes en la mesa de trabajo del sumo pontífice. Las cárceles aquí continúan llenas. En ellas languidecen unos 250 prisioneros políticos y de conciencia.

El gobernante cubano, en su lecho de muerte, se muestra renuente a la apertura. La vida aquí es un laberinto de dolor y penurias. El Papa nunca estuvo ajeno a esta realidad, pues él también vivió el nazi-fascismo y sufrió el estalinismo. Por eso nos regaló, con su peregrinación por Cuba, su amor y solidaridad.

En el año 1981, dijo que iría al lado de su pueblo si continuaba la represión desatada contra la oposición pacífica y el sindicato solidaridad.

Karol Wojtyla, hombre fiel a su fe, de dotes incomparables, graduado de filosofía, letras y teatro, escritor y gran orador, por su postura firme, fue víctima de varios atentados. Entre ellos el perpetuado por el turco Mehmet Alí Agca, el 13 de mayo de 1981. Sin embargo, en su perdón, lo visitó en la cárcel el 27 de diciembre de 1983.

Los cubanos siempre llevamos en nuestros corazones a este magno hombre y su ejemplo de fe, amor y esperanza para toda la humanidad.

Juan Carlos Herrera Acosta es miembro del Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba y coordinador nacional del Movimiento Jóvenes por la Democracia. Fue condenado en segunda causa a 20 años de privación de libertad durante la ola represiva de marzo de 2003. Reside en calle 3 Oeste #1105, e/ Pintó y Varona, Guantánamo, Cuba.

Centro de Información del Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba.

En este tiempo han continuado las violaciones a los derechos humanos, la mentira, el odio y la intolerancia. Continúan la represión y persecución por motivos políticos, las torturas en las prisiones.

Un día no muy lejano, desde su lugar junto al Señor, Karol Wojtyla contemplará con alegría que sus palabras no fueron en vano y que como los polacos y otros pueblos, los cubanos supimos demostrar que siempre estuvimos en favor de la libertad, los derechos humanos, la democracia, la justicia, la paz y la fraternidad entre todos los hombres.

Su confianza en el futuro de nuestra patria no será defraudada. Lo sabremos construir con mucho amor y responsabilidad.Gracias Juan Pablo II, por su visita y su afecto hacia todos los cubanos.

 
 
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente.