¡Pa' la casa otra vez!

Tico Morales, APLA


MORÓN, Cuba, octubre (www.cubanet.org) - No es la primera vez que los talleres ferroviarios, adjuntos a la Terminal de Ferrocarriles de Cuba, división centro-este,  radicados en esta ciudad, buscan soluciones para resolver los problemas con respecto a su parque de locomotoras y evitar las protestas de los trabajadores, que tienen fama de rebeldes.

Las autoridades ferroviarias ocultaron a la población que no tenían máquinas disponibles para transportar a los viajeros, y el martes 14 de octubre enviaron al 75 por ciento de los operarios y maquinistas para sus casas pagándoles su salario íntegro mientras estén sin trabajar. Al mismo tiempo, la administración de los talleres de Morón solicitó a su homóloga del Ministerio de la Industria Azucarera (MINAZ), que la prestara al menos dos locomotoras para aliviar el problema. Una solución, como reza el refranero revolucionario, “de tiempo de guerra"; una guerra impuesta a los cubanos que dura cinco décadas, y que nadie sabe cuándo terminará, porque las huestes del castrismo son inmensas y maquiavélicas.

Según algunos trabajadores de los talleres, las máquinas solicitadas al MINAZ servirán  para mover, una,  el tren suburbano entre las ciudades de Morón y Ciego de Ávila, y la otra será destinada al movimiento de materiales para la construcción de obras gubernamentales.

Mientras tanto, los miles de viajeros que viajan entre las provincias Sancti Spiritu, Ciego de Ávila y Camagüey  no podrán hacerlo por ferrocarril y tendrán que utilizar las carreteras, mucho más alejadas de los poblados.