MANZANILLO, Cuba, 19 de septiembre de 2013, Leonardo Cancio Santana Ponce/ Red Cubana de Comunicadores Comunitarios/ www.cubanet.org.- El domingo 1ro. de septiembre, ocurrió una salida clandestina por la desembocadura del río Cauto, en la Provincia Granma. 26 personas iban a bordo de una embarcación casera: 21 hombres y 5 mujeres trataban de abandonar el país, pero naufragaron.
Una participante, Mirja Yansy Naranjo Ortiz, explicó que fueron seguidos por un guardacostas hasta la zona de Cucharilla. Luego arribaron a un cayo nombrado Rabiahorcado, para instalarles estabilizadores a la embarcación. Al salir nuevamente al mar, había tormenta y fuertes marejadas que provocaron el naufragio. Uno de ellos, por un teléfono móvil, avisó a un familiar en Manzanillo, que a su vez se dirigió a la delegación de Guardafronteras, pero allí le informaron que no realizaban búsquedas en horas de la noche.
Algunos de los balseros llegaron a una boya conocida como Boya Verde. Una embarcación particular de nombre Los Abuelos rescató a cuatro mujeres y dejó agua potable y alimentos al resto. Posteriormente salvó a otros cuatro, en altamar. Destaca Mirja que otro grupo, de los restantes náufragos, fue rescatado por los guardacostas y los esposaron en ese momento.
El miércoles 4 de septiembre, en la zona de Guayabal, fueron divisadas otras siete personas por un barco del Combinado Pesquero, que avisó a los guardacostas y finalmente les evitaron un desenlace fatal.
El fatídico saldo de ese intento de salida del país, es de dos muertos, llamados Iván y Miguel Ángel; la fuente de esta información no pudo decir sus apellidos. No se conocían de cerca todos. También hay un desaparecido, que está dado por muerto, de nombre Tomás Aguilera. Quedan, hasta el momento de escribir esta nota (12 de septiembre de 2013), cuatro detenidos, entre ellos, Henri, el chofer del transporte de la ECOA 4 (Empresa de la Construcción) de Bayamo, que fue quien proporcionó el motor que utilizaron para la embarcación.