HOLGUÍN, Cuba.- Como un objeto museable, o peor aún, un objeto tirado al abandono, amaneció esta semana la escuela primaria “José Maceo Grajales”, de la calle Independencia entre Arias y Aguilera, del populoso reparto Vista Alegre en la ciudad cabecera de esta provincia nororiental cubana.
La institución docente no recibió a sus alumnos en el recién iniciado curso escolar. La paralización de las obras de restauración por deterioro constructivo del inmueble no permitió que sus estudiantes ocuparan un puesto en las aulas.
Mientras se concluye la inversión, en una fecha aún sin precisar, los colegiales recibirán las clases en la escuela primaria “Raúl Cepero Bonilla”. La decisión ha provocado insatisfacciones en los padres y trabajadores de ambos planteles.
“Ahora mi hijo tendrá que levantarse más temprano y caminar un mayor trayecto hasta llegar a la ‘Cepero Bonilla’, que queda muy distante de la casa”, asegura a CubaNet Liudmila Prieto, madre de un pequeño de siete años.
En esa situación están todos los estudiantes que no solo muestran disgusto por la lejanía, sino también por el peligro del recorrido que los obliga a cruzar calles de mucho tráfico.
El hacinamiento en las aulas de la escuela primaria “Raúl Cepero Bonilla” podría afectar el aprendizaje de los educandos, cuyas edades oscilan entre los siete y once años.
“Han unido dos grupos del mismo grado en un aula, y esto perjudicará no solo a los niños; también a mí como profesora que tendré que hacer un mayor esfuerzo y no podré impartir las clases con calidad”, comenta una educadora de tercer grado bajo identidad reservada.
Experiencias similares se viven en otras escuelas de Holguín, la tercera provincia más poblada de Cuba, con más de un millón de habitantes y al mismo tiempo con la red escolar más deteriorada del país, según declaró a la emisora local Radio Holguín Odalis Corpas Brito, presidenta provincial de la Organización de Pioneros José Martí (OPJM).
Para revertir el panorama, este año se trazó un plan de mantenimiento y reparación que abarca 109 obras con un presupuesto de más de ocho millones de pesos, una cifra insuficiente ante el gran deterioro constructivo de los inmuebles educacionales del territorio, reconoció Reynaldo Pupo Caballero, Jefe de Departamento de Inversiones de Educación Holguín, en entrevista concedida al canal local Telecristal.
“Las principales acciones que nosotros hacemos es la reparación total del centro, fundamentalmente en el cambio de la carpintería, reparación de la cubierta y la hidrosanitaria”, dijo Pupo Caballero.
Cifras oficiales dan cuenta que en Holguín la matrícula ha crecido en unos dos mil estudiantes, sin embargo no hay planes para construir nuevas escuelas.
“Del presupuesto estatal no asignan dinero para edificar nuevos centros educacionales, sin embargo, cada curso se cierran más escuelas por problemas de deterioro constructivo”, afirma a CubaNet un funcionario de la dirección provincial de Educación en condición de anonimato por temor a represalias.
Ejemplificó su afirmación citando solo de la ciudad capital al seminternado “Paquito González Cueto”, en la calle Miró esquina Cables, las Escuelas Secundaria Básica Urbana (ESBU) “René Ibarra”, situada en la calle Independencia del Reparto Luz y la céntrica “Menelao Mora”, ubicada en la calle Mártires entre Frexes y Aguilera; todas cerradas y con sus estudiantes reubicados en otras escuelas, desde el curso anterior.
Por su parte, la directora de la ESBU “Menelao Mora”, Maribel Pérez Iser, comentó al canal local sobre la necesidad imperiosa de cerrar la escuela por deterioro constructivo y trasladar a sus alumnos hacia la ESBU “Camilo Cienfuegos”.
“Ellos trabajaran cinco turnos de clases por la mañana, y nuestro centro cinco turnos de clases por la tarde. Los demás turnos de clases para cumplimentar el currículo escolar se darán en sesión contraria con convenios que hemos hecho con organismos y otras instituciones cumpliendo con el currículo escolar”, precisó Pérez Iser.
Entre las causas que impiden el avance en la restauración de las escuelas en Holguín se cita la inestabilidad en la entrega de los materiales de la construcción y la fluctuación de la fuerza de trabajo, aspectos que impedirán concluir para finales de diciembre lo que se ha previsto.
“Eso depende también de la disponibilidad y la carga que nos de la industria. Son muchas obras y a todas las obras no le podemos llegar el mismo día”, recalca Pupo Caballero.
Sin embargo, el funcionario no precisó los motivos que impidieron acometer una reparación oportuna a la red escolar Holguinera.
“Hubiera sido menos costoso si la inversión se hubiera realizado años atrás. Ahora hay que gastar más recursos porque el deterioro es mayor”, comentó a CubaNet Alexis Pupo, un albañil de una de las brigadas en construcción.
Según cifras oficiales, Holguín cuenta con más de 1 300 instituciones educacionales de las cuales el 94 % está evaluada entre regular y mal en cuanto a su estado constructivo.
La provincia es la segunda en Cuba con más bajo nivel de escolaridad, y el municipio “Calixto García” el de más bajo índice en ese indicador en el país, de acuerdo a datos del último censo de población y vivienda.
En el territorio se han incrementado los índices de deserción escolar, embarazo precoz y suicidio en la adolescencia.
La dirigente de la OPJM reconoció que la restauración de los centros escolares es el principal reclamo de los más de 70 000 estudiantes de las escuelas primarias en Holguín.