MIAMI, Estados Unidos.- Los presos cubanos que grabaron y difundieron la semana pasada varios vídeos donde denunciaban las condiciones su encierro están sufriendo represalias por parte del gobierno.
Según dio a conocer la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios en su sitio web, el régimen cubano decidió castigar a los reos con el “traslado inmediato y forzado de todas las personas que tuvieron participación en el material expuesto, hacia otras prisiones del país sin que pudieran dar pronto aviso a los familiares”.
Lázaro Raúl Rivero Quintana, uno de los trasladados, “fue sacado semidesnudo de la celda donde se encontraba durmiendo en la madrugada del viernes 8, por efectivos de las Brigadas Especiales del Ministerio del Interior (MININT) en un aparatoso operativo, quienes sin dar razón alguna al recluso lo violentaron contra el piso para neutralizarlo y ponerle unas esposas cogidas por cadenas en las manos, cintura y pies, y acto seguido fue introducido en un vehículo hermético sin conocer su futuro paradero, hasta que en horas de la noche del propio viernes se percató que lo habían llevado para la prisión camagüeyana Kilo-7”, de acuerdo a la descripción de su hermana, que pudo conversar con él por teléfono luego de los hechos.
Luego Rivero Quintana “fue sacado de la celda de la prisión Kilo-7 para ser interrogado por espacio de dos horas, por un oficial enviado desde La Habana con rango de teniente coronel del Ministerio del Interior, un rato después del interrogatorio efectuado fue nuevamente trasladado de forma forzada hacia otra prisión de la provincia camagüeyana conocida como ‘La 26’, centro penitenciario de mayor rigor disciplinario”, añadió la fuente.
La Red Cubana de Comunicadores Comunitarios afirma que “hasta el momento de redactar esta nota informativa, se desconoce el paradero y situación actual de los otros reclusos que igualmente sufrieron traslado”.
En una grabación filtrada la pasada semana, reos de la cárcel Canaleta en Ciego de Ávila denunciaron “torturas y muertes por falta de atención médica”. Llamaron a su prisión “un corral de puercos”.
Según el Instituto de Investigación sobre Políticas Criminales (ICPR, por sus siglas en inglés), Cuba es el segundo país de la región comprendida por México, América Central y el Caribe con la tasa más alta de hacinamiento en las cárceles. En la isla hay cinco prisiones de máxima seguridad y otros 195 centros penitenciarios, de las que 40 son en régimen cerrado.