LA HABANA, Cuba, 31 de marzo (C/R Otero, 173.203.82.38 ) -Máximo Fernández, de 59 años, fue encontrado muerto, al parecer estrangulado, en la mañana del 20 marzo, en su domicilio, sito en la esquina de las calles Empedrado y Aguacate, en la Habana Vieja.
El cadáver presentaba hematomas en el torso, en la zona de las costillas, al parecer originados por golpes con algún objeto contundente, comentaron a este reportero unos vecinos.
Según las fuentes, al notar que desde hacía más de dos días la casa estaba cerrada y no se veía a Máximo, los vecinos llamaron a la policía. Agentes de la unidad policial de la calle Egido, en La Habana Vieja, ingresaron a la casa y encontraron el cuerpo tirado en el piso. Los peritos dijeron que por lo menos llevaba un día muerto.
Máximo era un garrotero (prestamista). Refieren las fuentes que solía afirmar: “yo le resuelvo a la gente casos graves, pero cobro piedra fina”. En la charada, el 25 es piedra fina, por lo que se deduce que cobraba por cada préstamo un 25 % de interés.
El garrotero presumía de que su “banco”, contaba con sicarios que disciplinabab a los morosos con palizas y, si era necesario, les quitaban los objetos de valor que tuvieran para pagar la deuda.
Jorge Ramón, un vecino del barrio, afirma que el asesinato de Máximo Fernández fue un ajuste de cuenta por sus abusos.
Otros vecinos, que no quisieron dar sus nombres, comentaron que el garrotero era protegido por policías corruptos.
cubano2000cisd@yahoo.es