MIAMI, Estados Unidos. – Las detenciones y multas arbitrarias se han convertido en el pan de cada día de los miembros de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU). Así lo aseguraron sus miembros mientras reportaban las últimas acciones represivas.
El pasado viernes, luego de más de cuatro horas de detención, y sin que durante ese tiempo se conocieran sus paraderos, fueron liberados Ernesto Rivery Gascón y Ángel Hinojosa Castellanos.
“Nos llevaron para la Segunda Unidad El Palacete. Allí estaba el represor Addriel. Me hizo varias amenazas sino disminuía mi nivel de activismo”, contó Rivery Gascón, que fue multado con 100 pesos en CUP por “desobediencia”.
En el caso de Hinojosa, también fue multado con la misma cuota.
“Me dijeron que esa sanción era por visitar lugares prohibidos, refiriéndose a la casa de Miraida Martín donde radica la célula Los Maceos, que es a la que yo pertenezco”, explicó el opositor.
Tanto Ernesto como Ángel también promueven la iniciativa ciudadana Cuba Decide. Ambos son de los activistas que más salen a la calle a recoger opiniones de la población que después son publicadas en el canal de la UNPACU en YouTube.
Pero estos no fueron los únicos miembros del grupo opositor detenidos ayer.
En la terminal Bartolomé Masó, ubicada en el municipio granmense de Manzanillo, fue arrestado Osmani Mendoza Ferriol, hermano de Osvaldo Mendoza Ferriol, que se encuentra en huelga de hambre desde el pasado 29 exigiendo ser liberado.
El pasado 15 de mayo Osmani Mendoza fue puesto en libertad luego de cumplir una sanción de cuatro años por los supuestos delitos de “acaparamiento y actividad económica ilícita.
Para el próximo 6 de agosto está fijada la fecha de juicio contra el opositor Onelvis Flores Hechavarría.
Flores fue detenido el 18 de junio. Luego de 12 días en los calabozos de la unidad policial de Jovellanos en Matanzas, fue liberado y acusado de los supuestos delitos de propagación de epidemia, desacato y desobediencia.
“Son los mismos delitos que le fabricaron a Keilylli de la Mora Valle. La policía solo les deja dos opciones, prisión o colaborar con la tiranía”, denunció José Daniel Ferrer.
En Camagüey, Ediyersi Santana Jouz y Maykel López Sotomayor también se encuentran a la espera de una farsa judicial por negarse a pagar multas de 3 000 pesos, ahora duplicadas, que les fueron impuestas en virtud del Decreto-Ley 370.
“Es probable que en los próximos días estos activistas se sumen a la lista de presos políticos de la UNPACU, que ya esta cercana a la cifra de 40, que fue la cuota que la dictadura nos determinó en el año 2012”, aseguró Ferrer.
Según el líder opositor, hace ocho años el teniente coronel Alejandro Domínguez, jefe de la policía política en Santiago de Cuba, le advirtió que sus superiores habían determinado dos opciones: encarcelarlo por 20 años o encarcelar a 40 o 50 coordinadores y activistas destacados.
En aquel momento, el líder de la UNPACU estuvo arrestado por 29 días en el Centro de Instrucción Penal Versalles.
Desde entonces, más de 250 miembros del grupo opositor han sufrido presidio político.
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