MIAMI, Estados Unidos.- El sacerdote católico Castor José Álvarez Devesa convocó este domingo a los cubanos, durante su misa por el inicio de Semana Santa, a enfrentar la realidad y “meter el cuerpo” a los problemas.
El padre, un abierto crítico del régimen castrista, transmitió en vivo la homilía desde su perfil de Facebook, y exhortó a los cubanos a no eludir las dificultades que se viven en la Isla.
“Nosotros, hay veces, los cubanos, queremos quitarle el cuerpo al problema. No te metas en problemas no te metas en el lío. Pero siguen los problemas, siguen los problemas… Entonces, ¿qué es lo más fácil? Zafar el cuerpo. Dichosos aquellos que le meten el cuerpo al problema y cargan la cruz de Cristo, porque es verdad que sufrirán muchos golpes, como el Señor, pero también resucitarán, como Jesús resucitó de la cruz”, dijo el sacerdote.
Este domingo el Padre Castor llamó a los cubanos a no tener miedo y a ser fieles a Cristo. “Vamos, pues, a pedirle al Señor que nosotros no tengamos miedo de amar, de ser fieles a Cristo. Vamos a pedirle al Señor perdón, porque nosotros hemos pecado y lo hemos abandonado”.
Asimismo, agregó que “vamos a pedirle que nos llene de su amor para ser fiel a Él en todos los momentos. Fiel al que está sufriendo a nuestro lado, preso injustamente por política, al que está sufriendo porque no tiene alimento, el que está sufriendo a nuestro lado. Que nosotros seamos fieles, como Jesús, que dijo: Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos”, concluyó.
El religioso, de 49 años de edad, ingresó en la enseñanza sacerdotal luego de ser expulsado de la Universidad de Oriente por “problemas políticos”.
El padre Castor ha firmado varias cartas, junto a otros sacerdotes católicos, dirigidas al gobierno cubano en las que los religiosos llaman la atención sobre la crisis socioeconómica y política que enfrenta Cuba, así como la necesidad de un cambio urgente en el país que alivie la pobreza que vive el pueblo.
También en 2018 envió una carta Raúl Castro en la que él y otros religiosos católicos le piden la apertura del país de cara a un cambio de mandato. En esa misiva, los firmantes reclaman incluso el lamentable desamparo económico “que vive este pueblo, obligado por las circunstancias a mendigar la ayuda de familiares que lograron marchar al extranjero o a los extranjeros que nos visitan”.
“Nuestro pueblo está desanimado y cansado, existe un estancamiento que se resume en dos palabras: sobrevivir o escapar. Los cubanos necesitan vivir la alegría de “pensar y hablar sin hipocresía” con distintos criterios políticos. Estamos cansados de esperar, cansados de huir, cansados de escondernos. Queremos vivir nuestra propia vida”, dice el texto de 2018.
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