MIAMI, Estados Unidos. — El activista cubano Ramón Saúl Sánchez, líder del Movimiento Democracia, no será deportado a Cuba, según determinó un juez en la audiencia sobre el caso, celebrada esta tarde en la ciudad de Miami.
“¡Gracias a Dios! ¡Gracias al juez y la corte, y al gobierno, que se portaron tan profesionalmente y tan justamente! Y muy especialmente: gracias a Willy Allen (…), a los abogados, y a los equipos de todos ellos”, declaró el activista cubano a la salida del tribunal, donde le esperaba una multitud exiliados.
Según Ramón Saúl, el juez le entregó una orden de protección contra la tortura, lo que cierra la puerta a una eventual deportación a la Isla.
“Me dieron protección contra la tortura (…) se impide la deportación mía. Ahora, gracias a eso, tengo la posibilidad de permanecer en Estados Unidos, que es lo más grande”, expresó a la prensa local el líder del Movimiento Democracia.
“Obtuvimos una orden de protección contra deportación, era lo que queríamos. Ya terminamos”, dijo el reconocido abogado de inmigración Willy Allen, quien estuvo a cargo del caso.
Allen indicó que el veredicto del juez le permite también a Ramón Saúl continuar su aplicación de residencia con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés).
Ahora, sin riesgo de ser deportado, Ramón Saúl Sánchez podrá continuar adelante con su sueño de regularizar su estatus en el país norteño, al que llegó hace más de cinco décadas.
“La residencia todavía, eso sigue en corte. Espero que alguna vez en mi vida pueda ser residente”, agregó el activista.
Ramón Saúl destacó la profesionalidad de la corte, y calificó el resultado final del proceso como “un acto de justicia”.
“Destaco la cortesía del fiscal del Gobierno. Fue un ejercicio donde yo vi la corte funcionando. Eso es lo que yo quiero para mi país”, subrayó el exiliado.
Nacido en 1954, Ramón Saúl Sánchez llegó a Estados Unidos como refugiado político en 1967 en los llamados “Vuelos de la libertad”. Su defensa argumentó que, de ser devuelto a su país de origen, corría peligro de ser torturado.
El veredicto del juez pone fin a un proceso de décadas sobre la situación migratoria de Ramón Saúl Sánchez, al que el régimen cubano ha calificado de terrorista, acusaciones que él ha negado en reiteradas ocasiones.