MIAMI, Estados Unidos. — Bricella Hernández Medina, una cubana residente en Santiago de Cuba, denuncia el abandono por parte de las autoridades de esa provincia, que han hecho oídos sordos a sus numerosos reclamos de atención médica y ayuda humanitaria.
La mujer, de 46 años, sufre de incontinencia urinaria y otros graves problemas de salud. A pesar de haber sido operada en 24 ocasiones, sus problemas no han hecho más que empeorar.
“Denunció abiertamente a mi gobierno, ya que no se ocupa de una mujer desvalida, más cuando fui víctima de cinco perforaciones. Sigo en mi lucha por una mejor calidad de vida”, indicó la mujer a CubaNet.
Hernández Medina fue trabajadora de Salud Pública. Sin embargo, al ser diagnosticada con displasia moderada, una patología provocada por ciertos virus del papiloma humano, se vio obligada a abandonar su trabajo para tratar sus diversos padecimientos. Ha sufrido perforaciones de la vejiga y la vagina, pero nada de ello le ha devuelto el bienestar.
“No puedo trabajar; sobrevivo con una chequera de 1.500 pesos que solo me da para un paquete de pamper. Soy diabética, hipertensa, colitis, gastroparesia, trombofilia, acalasia esofágica, una hernia grande, más la incontinencia urinaria grado 3 que me consume la vida. Ya no sé qué más hacer ni a dónde acudir. He intentado hacer viral mi caso para una ayuda humanitaria y así mejorar mi calidad de vida, pero nada”, explicó la mujer, que habita en una vivienda en pésimas condiciones.
Bricella destaca que en Santiago de Cuba “no aparecen los pamper” tan necesarios para ella, al menos que sea en moneda libremente convertible (MLC), algo que no está a su alcance.
“Estoy desesperada. Lo juro: es insólito que no allá un dirigente o alguien que se responsabilice con mi problema de salud”.