MADRID, España.- El 1 de octubre de 1942 nació en La Habana Héctor Quintero, quien desde la niñez mostró sus dotes artísticas en programas de radio y televisión y llegó a convertirse en uno de los más populares y exitosos de los dramaturgos cubanos.
Dramaturgo, narrador, director, debutó como actor en el teatro en el año 1957 y de 1962 a 1967 trabajó en el Instituto Cubano de Radiodifusión. Su primera obra, Contigo pan y cebolla —escrita en 1962—, obtuvo mención en Teatro en el concurso Casa de las Américas en 1963. Luego crearía El premio flaco, que estrenada en 1966 recibió, entre varios galardones, el Primer Premio del Instituto Internacional de Teatro en París, en 1968.
Ambas puestas, consideradas entre las más importantes producciones del teatro cubano, retomadas con posterioridad por varios grupos escénicos, han sido llevadas al cine, representadas en diversos países y disfrutado de éxito internacional.
Continuador del teatro vernáculo, fusionó sus aptitudes de comediante con la música y el teatro, y al incursionar en la cotidianidad de la Isla, logró mantener llenas las salas teatrales por no pocos meses, como con el espectáculo satírico musical Algo muy serio, estrenado en 1976 por el Grupo Teatro Estudio en la sala capitalina Hubert de Blanck, y el cual alcanzó cifra récord de espectadores: más de 45 mil personas.
Muy popular y reconocida sería también La última carta de la baraja (1978). Otras de su creaciones fueron Los muñecones (1967), Los siete pecados capitales (1968), su versión de Los cuentos del Decamerón (1969), Mambrú se fue a la guerra (1970), Si llueve te mojas como los demás (1971), Paisaje blanco (1973) —adaptación de relatos de los autores rusos Antón Chéjov, Alexander Pushkin y Nikolái Gógol—. Y el serial dramatizado El año que viene, que escribió y dirigió para la Televisión Cubana.
Se sumarían en los años ochenta y noventa algunas obras teatrales como Sábado corto, Te sigo esperando y El lugar ideal, con la que se reabrió en 1998 el Teatro Fausto, y que igualmente resultó ovacionada en el Teatro Hispano Gala, de Washington DC, bajo la dirección del dramaturgo y actor argentino Hugo Medrano, fallecido en mayo pasado.
Premio Nacional de Teatro 2004, Héctor Quintero, quien había dirigido el Teatro Musical de La Habana y fuera estimado por muchos como el más popular y exitoso de los dramaturgos cubanos, falleció el 6 de abril de 2011.