MIAMI, Florida, Redacción.- Activistas de UNPACU que realizan una huelga de hambre desde el pasado domingo siguen asediados por la policía de Guantánamo, ahora negados a aceptar que contrajeron el cólera. Continúan acuartelados en la vivienda de uno de ellos, sin que nadie pueda acceder, excepto la asistencia médica que envía el gobierno comunista de la isla.
Ayer llevaron tres ambulancias para hacerles la prueba del cólera y les repartieron dos pastillas de acitromicina por huelguista. Según Niober García Fournier, que habló por teléfono esta mañana con la redacción de Cubanet, los activistas tomaron las pastillas y pasaron la noche fatal, con vómitos y diarreas, cansancio y dolor muscular.
Ellos no aceptan ser portadores de cólera, sino dicen que se trata de una estrategia de la policía política para desarticular la huelga de hambre. Esta protesta es una consecuencia del procesamiento sin delito alguno de unos activistas de UNPACU en Caimanera, municipio de Guantánamo, quienes están a punto de ir a la cárcel.
De hecho, confirma García Fournier, ya fue dado de alta Marco Antonio Morán Pelegrín, el huelguista que ayer tuvo que ser hospitalizado, lo que demuestra que no hay presencia de la pandemia entre ellos.
En la mañana de hoy volvieron a fumigar la vivienda donde se encuentran, ubicada en la calle San Lino entre 2 y 3 Sur. Las fuerzas del orden, junto con médicos colaboradores, se llevaron de allí a tres niños, familiares de los huelguistas, con el objetivo de analizarlos clínicamente.
Son ellos la niña de solo diez meses de vida Camila del Carmen García Cuba; la niña Yennis Camacho Sainz, de tres años de edad, y el varón Yoennis Beltrán Chacón, de nueve años.
Todos están internados en el hospital pediátrico provincial “Pedro Agustín Pérez”. Los familiares de estos niños responsabilizan al gobierno cubano por cualquier cosa que les pueda suceder, ya que salieron sanos de la vivienda, comenta el activista Niober García Fournier.
En su opinión, es más fácil que contraigan enfermedades en el hospital que en donde estaban, ya que el centro de salud provincial se encuentra en pésimas condiciones de higiene.
La vivienda donde se encuentran los huelguistas, en el centro de Guantánamo, continúa sitiada por la policía. Hasta el momento, Cubanet continúa manteniendo comunicación telefónica con ellos, cuya salud se debilita cada día. Este domingo hará una semana del comienzo de la huelga de hambre. Continúan ingiriendo agua para mantenerse hidratados, confirmó García Fournier.
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