LA HABANA, Cuba, mayo, 173.203.82.38 -El castrismo creó un sistema electoral a su imagen y semejanza. Es por ello que lo coherente aquí seria sustituir el término elecciones por el de selecciones. Pero sigámosle el juego a la Ley Electoral y utilicemos el vocablo elecciones.
Un rol esencial del proceso electoral en Cuba lo tienen las Comisiones Electorales: nacional, provinciales, municipales, de circunscripciones y las de distritos. Las que se activan cada dos años y medio para la realización de elecciones parciales, y cada cinco años para elecciones generales.
En las parciales, se eligen a los Delegados para las Circunscripciones (que son los gobiernos locales) y también los Delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular. En las elecciones generales, además de las dos regencias antes mencionadas, conjuntamente se eligen los Delegados a las Asambleas Provinciales y a la Asamblea Nacional del Poder Popular.
En este año 2012 corresponde efectuar elecciones generales. En comunicación telefónica con una funcionaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular, me informó que posiblemente “la campaña” comience en junio próximo. Le pregunté si se han previsto modificaciones en la Ley Electoral, y me respondió que no.
La Ley Electoral cubana, en esencia es un instrumento en manos de los castristas, un verdadero montaje para buscar legitimidad para el régimen. Al mismo tiempo, es una garantía para repeler el acceso de los disidentes al gobierno.
El trabajo sucio lo hacen las Comisiones Electorales, que son las que por Ley “participan y supervisan los procesos de nominaciones…”, “elaboran las lista de los electores…”, “circulan y exponen en lugares públicos las fotografías y biografías de los candidatos…sin propagandas ni politiquerías”, “verifican y resuelven las exclusiones e inclusiones de los electores…”, y velan porque los candidatos reúnan “los requisitos establecidos”. ¿Cuáles requisitos?, pues uno solo, el de comportarse como todo un Mosquetero de la revolución socialista.
Con el artículo 31 se aumenta el número de comisiones electorales. En este caso, las denominadas Comisiones Especiales, tuteladas por la Comisión Electoral Nacional. Pero lo de las comisiones no termina ahí. El articulo 67 puntualiza que “para elaborar y presentar los proyectos de candidaturas de Delegados a las Asambleas Municipales, Provinciales o de Diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular”, y aquí viene la cuña, “se crean comisiones de candidaturas Nacional, Provinciales y Municipales”.
Tales candidaturas están integradas por representantes de las organizaciones satélites del gobierno, como son los Comité de Defensa de la Revolución, la Federación de Mujeres Cubanas, la Asociación Nacional de Agricultores pequeños, Central de Trabajadores de Cuba…Algo así como poner a la sombra a vigilar su sombra.
En fin, el que hizo la trampa hizo las Comisiones Electorales. Pero si de verdad el continuismo castrista quiere dar un poco de credibilidad a las elecciones-selecciones que vienen en camino, tendrá que añadirle aunque sea un mínimo de transparencia. Digamos, para “guardar la forma”. Algo bien poco probable, pues, aunque griten lo contrario, le temen a la disidencia.