PARÍS, Francia.- Francia vivió anoche un baño de sangre que deja luto y consternación en el mundo.
Al publicarse esta nota, 127 personas habían muerto a causa de al menos siete atentados simultáneos en la capital francesa, perpetrados con explosivos y ametralladoras.
El peor de ellos ocurrió en el teatro Bataclan, en el que se celebraba un concierto, donde fallecieron 118 personas. Ahí, hombres armados mantuvieron a varias personas como rehenes y dispararon durante al menos 10 minutos.
Otras explosiones se escucharon en el interior del estadio de Francia, en el que se jugaba un partido amistoso entre la selección local y la de Alemania, y al que había asistido el presidente francés, François Hollande. El recinto fue desalojado.
Hollande declaró el estado de excepción y el cierre de fronteras para evitar que los responsables, a quienes identificó como terroristas, escapen del país. Los atentados suscitaron la condena de varios países y la solidaridad con el pueblo francés.
ISIS se adjudica los atentados
El grupo yihadista autodenominado Estado Islámico (EI) reivindicó hoy en un comunicado de texto y audio difundido en internet la autoría de los ataques terroristas de anoche.
“Ocho hermanos ataviados con cinturones explosivos y ametralladoras atacaron objetivos seleccionados con precisión en el corazón de la capital francesa”, señala el comunicado, publicado en foros yihadistas y redes sociales.
Además, el grupo terrorista lanzó una amenaza: “Que sepa Francia y los que van en su camino que van a estar a la cabeza de los objetivos del (grupo) Estado Islámico y que el olor a muerte no va a abandonar sus narices mientras que lideren la campaña cruzada” contra los yihadistas en Siria e Irak.
El comunicado justificó su amenaza porque, según los yihadistas, los franceses “se atrevieron a insultar al profeta (Mahoma) y se jactaron de luchar contra el islam en Francia y de atacar a los musulmanes en la tierra del califato con sus aviones, que no les sirvieron para nada en las calles de París”.
“Esta batalla es la primera y es una advertencia para los que quieran aprender de ella”, añade el mensaje.
Entre los objetivos atacados, el grupo terrorista destacó el Estadio de Francia, durante un partido entre “los cruzados” Francia y Alemania y al que asistía el presidente francés, François Hollande.
También resaltó la sala de fiestas Bataclan, “donde se concentraron cientos de apóstatas en un concierto amoral y de desenfreno”, además de otros objetivos que fueron atacados de forma simultánea en los distritos X, XI y XVIII de la capital francesa.
“Tembló París (…) se estrecharon sus calles y el saldo de víctimas de los ataques fue de al menos 200 cruzados muertos y más heridos, gracias a Dios”, continua el comunicado.
Además, la organización terrorista precisó que los atacantes activaron sus cinturones explosivos en medio de los infieles “después de que se quedaran sin munición”.
“Esperamos que Alá los acepte entre los mártires y que nos lleve con ellos a nosotros también”, agrega su comunicado.
Asimismo, el EI calificó a Francia de “capital del desenfreno y del vicio y portadora de la bandera de la cruz (en referencia al cristianismo) en Europa”. (AGENCIAS)