Un oficial de la policía que patrulla el área de la Rampa, en La Habana, se encuentra a un borracho en la calle y le pregunta:” ¿Compañero, ¿qué hace tirado en la acera? El borracho le dice que trabaja de portero en el hotel Habana Libre, que está en la acera de enfrente. El policía no le cree, y le pide su Carnet de Identidad. El policía lo lee detenidamente y se percata que ese ciudadano vive cerca del lugar y lo lleva a la casa. La esposa abre la puerta y el policía le hace la historia a lo que la señora le dice:
– ¿Portero del Hotel Habana Libre? No hombre no; ya quisiera él. Lo que pasa es que cada vez que se emborracha le da por delirio de grandeza. En realidad mi esposo es un neurocirujano del Hospital Calixto García…”
Tomado de España Cubaenvivo.com