El líder ruso, Vladímir Putin, ha ordenado la puesta en alerta de las tropas en los distritos militares Occidental y Centro, así como a los mandos de las diferentes ramas de la Fuerza Aérea, incluida la aviación estratégica.
Shoigú señaló que el Comandante Supremo, cargo que según la Constitución rusa desempeña el presidente del país, ordenó “comprobar la disposición combativa de las tropas para resolver situaciones de crisis que representan una amenaza para la seguridad del país”.
Esta misión ordenada por Putin se realizará en dos etapas, explicó el ministro de Defensa. La primera es “de despliegue” y la segunda, maniobras en tierra y aire.
El distrito militar Occidental limita con Ucrania, país donde se viven actualmente momentos de tensión. Putin no ha hecho ningún comentario público sobre el país vecino desde que su colega Víctor Yanukóvich abandonó Kiev, aunque en el comunicado de la conversación telefónica mantenida entre el líder ruso y la canciller alemana, Angela Merkel, se dijo que ambos estaban de acuerdo en que la integridad territorial de Ucrania debía mantenerse.
Tanto Estados Unidos como algunos países europeos han advertido la inadmisibilidad de una intervención militar en Ucrania, y funcionarios rusos de alto nivel han asegurado que Rusia no tiene intención de injerirse en los asuntos internos de su vecino. Sin embargo, las provincias orientales de Ucrania son de mayoría rusohablante, y esa población, especialmente en la península de Crimea, teme que las nuevas autoridades la discriminen.
El año pasado, los ejercicios militares sorpresivos de mayor envergadura ser realizaron en julio, en el extremo oriente ruso, y en ellos participaron 160.000 efectivos. De momento no se ha informado sobre la cantidad de soldados que toman parte en estas maniobras de los distritos Centro y Occidental.