GUANTÁNAMO, Cuba.- Arturo Feliciano Acosta Guillén, Vicepresidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) que dirige Elizardo Sánchez Santa Cruz, ha sido advertido por la Seguridad del Estado de la provincia de Guantánamo que no puede viajar a Johannesburgo, Sudáfrica, para participar en una conferencia patrocinada por la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) que se realizará en esa ciudad entre el 23 y el 27 de agosto próximos.
Vecino de la calle de Ahogados 1004, entre Donato Mármol y Carretera en Guantánamo, Arturo está vinculado a la CCDHRN desde hace años y es quien atiende la zona oriental del país por dicha organización pacífica.
Según refirió a CubaNet, el pasado domingo 7 de agosto, a las 8:30 a.m., el ómnibus de la corporación Gaviota en el que viajaba hacia La Habana fue interceptado por la Seguridad del Estado en el kilómetro 12 de la autopista Guantánamo-Santiago de Cuba. Allí fue detenido por dos oficiales, quienes lo obligaron a entrar en el jeep verdeolivo 705, del Ministerio del Interior (MININT). Antes de bajar del ómnibus Arturo informó a los pasajeros que él no era ningún delincuente sino un defensor de los derechos humanos, lo cual irritó a los oficiales porque, en casos como este, después de la detención, acostumbran a subir a los vehículos y desprestigiar a los opositores endilgándoles conductas delictivas.
Arturo fue trasladado hacia la unidad de la policía del poblado de La Yaya. Allí permaneció hasta las 2:45 p.m. sin que se redactara acta de su detención ni se le informara por qué había sido detenido, lo cual constituye una violación de los artículos 241 y 242 de la Ley de Procedimiento Penal, pues no se encontraba en ninguno de los supuestos legales que permiten la detención de un ciudadano cubano. Tal hecho también constituye una violación del artículo 58 de la Constitución de la República, donde se establece que “la libertad e inviolabilidad de la persona están garantizadas a todos los que residen en el territorio nacional” y que “nadie puede ser detenido sino en los casos, en la forma y con las garantías que prescriben las leyes”.
A las 3:00 p.m. de ese día 7 de agosto el opositor fue trasladado hacia la Unidad Provincial de Operaciones del MININT en Guantánamo, donde registraron su maletín y le ocuparon una agenda con datos personales y números de teléfonos. Aunque le devolvieron la Carta de Invitación a la conferencia internacional de Johannesburgo y el itinerario de vuelo le advirtieron que no podía salir de Guantánamo. La agenda con información personal no fue devuelta.
En la Unidad Provincial de Operaciones del MININT Arturo estuvo detenido 25 horas, hasta que el 8 de agosto a las 9:30 a.m. fue puesto en libertad.
La pasada semana el opositor pacífico fue a la Fiscalía General de la República en la provincia, donde le comunicaron que ellos no tenían nada que ver con su queja, que se entendiera con el Departamento de Atención a la Ciudadanía del MININT, una respuesta reiterada que también es una violación de lo establecido en el artículo 127 de la Constitución de la República, que establece que esa entidad es el órgano encargado del control y la preservación de la legalidad, sobre la base del estricto cumplimiento de la Constitución y las leyes”, vinculado con el artículo 10 de la Carta Magna que establece el principio mediante el cual todos los funcionarios del estado están obligados a respetar la institucionalidad del país.
Siguiendo las instrucciones de la Fiscalía Arturo se presentó ante el Departamento de Atención a la Ciudadanía del MININT el jueves11 de agosto y allí también le dijeron que ellos no tenían nada que ver con lo ocurrido, que se entendiera con los oficiales de la Unidad de Enfrentamiento a la Contrarrevolución, es decir, con los mismos que lo detuvieron ilegalmente.
A dicho lugar también fue Arturo el pasado 12 de agosto y luego de esperar hasta las 4:00 p.m. para que lo atendieran, un uniformado le dijo que se fuera, que todos los oficiales estaban festejando el cumpleaños de Fidel Castro.