HOLGUÍN, Cuba.- Las casas y las vidas de cinco familias holguineras corren peligro ante el inminente derrumbe de un tanque elevado en el reparto Villa Nueva de la ciudad de Holguín.
El tanque dejó de prestar servicio hace más de cinco años y su estructura de prefabricado pueden colapsar en cualquier momento, según las conclusiones de un dictamen realizado por el arquitecto de la comunidad, el ingeniero civil Mario Romero. Esto nos lo asegura Rigoberto Llosa un vecino que habita con su familia en una de las viviendas en riesgo.
“Varios fragmentos de concreto han caído sobre mi casa desde los quince metros de altura y milagrosamente no ha habido un accidente”, asevera Rigoberto.
Por otro lado, en el tanque se acumula el agua de lluvia y esto lo convierte en un reservorio donde se reproduce el Aedes Aegypti, mosquito transmisor de enfermedades y contra el que se ha emprendido una batalla en Holguín por un brote de dengue que afecta desde hace un año al municipio capital.
Sin embargo, los focos de mosquitos que se han creado en el tanque no se han eliminado. Las brigadas sanitarias no han podido subir hasta la cima por el deterioro que presenta la escalera.
“Yo estuve con dengue y en la zona siguen apareciendo personas afectadas por esta enfermedad. Pensamos que una de las causas es el foco tan grande de mosquito que hay allá arriba”, dijo Rigoberto señalando al tanque con el dedo.
El problema se ha planteado en las Asambleas de Rendición de Cuentas, pero las gestiones de Luis Osorio Concepción, el delegado de circunscripción (persona elegida para tramitar los problemas del pueblo), han sido infructuosas.
Otra afectada es Lisandra Richelme cuyo hijo de once años está obligado a pasar todos los días por la calle próxima al tanque camino a la escuela.
“Parece que las autoridades están esperando que muera una persona para encontrar una solución”, dijo la preocupada madre.
La situación creada ha tomado un matiz político pues Lisandra aseguró que los vecinos se sienten abandonados y que en forma de protesta han decidido no asistir a la asamblea de rendición de cuentas del delegado convocada para los próximos días.
“No tiene sentido que participemos en la asamblea si no se ha resuelto este viejo planteamiento a pesar de que está en riesgo la vida de los habitantes de esta comunidad”, dijo.