CIENFUEGOS, Cuba, 11 de junio (Liosvani Alfonso Castillo, 173.203.82.38) – Una rotura en una tubería conductora de aguas albañales en Los Obreros ha inundado con aguas contaminadas una de las calles principales de ese barrio cienfueguero, poniendo en grave peligro la salud de los vecinos del lugar e impidiendo el tránsito vehicular y de peatones.
Alberto Vega residente de Los Obreros dijo que la rotura, en la avenida 62 entre 83 y 85, tiene algo más de dos semanas y, a pesar de las gestiones y quejas presentadas ante varias instancias del gobierno, de la abertura continúan emanando aguas pútridas ante la mirada indiferente de las autoridades locales.
Un fuerte olor a excrementos es lo primero que golpea el olfato de los que arriban al lugar. Niños del vecindario juegan en las márgenes de la pestilente “laguna” que ocupa toda la calle, saturada de larvas de mosquitos que se zarandean en el viscoso líquido.
“Le hemos solicitado a funcionarios del gobierno que envíen un carro cisterna para drenar la calle y hasta el momento nada. Están esperando que el agua se evapore con el sol”, dijo Vega. “Hasta ahora la única medida que han tomado es echar un poco de petróleo al agua para ver si contienen la plaga de mosquitos”, agregó.
Cada año, el Gobierno cubano despliega una amplia campaña propagandística sobre los ingentes y denodados esfuerzos que hace para combatir el mosquito aedes aegypti, transmisor del dengue hemorrágico, una de las enfermedades más mortíferas del hemisferio. A los aspectos educativos o profilácticos de la cruzada gubernamental se incorporan las multas a quienes se les encuentren larvas del mosquito en sus casas.
“Si me cogen con un recipiente pequeño destapado en mi casa me quieren ‘comer’ a multas. Sin embargo ¿quién ve esto?”, comentó apuntando a las putrefactas aguas.
“Si esto ocurriera frente a la casa de un dirigente, ya hace rato que hubiesen arreglado todo esto”, dijo indignado Vega.