CIENFUEGOS, Cuba.- El pasado domingo concluyeron los carnavales cienfuegueros bajo estricto control policial, en un contexto que destaca por el alto índice de violencia que registra la provincia durante el año en curso.
El carnaval fue inaugurado finalmente el día 6, tras varios días de incertidumbre, provocada por rumores que aseguraban serían suspendidas las festividades, a consecuencia del creciente número de asesinatos que se han venido sucediendo desde enero a la fecha, y que han tenido su pico durante el periodo vacacional.
Las fiestas tuvieron lugar en La Plaza de Actos de la provincia, que cuenta con una extensión aproximada de 10 mil metros cuadrados. Estuvieron custodiadas por cuantiosos efectivos de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), Ministerio del Interior (MININT), Avispas Negras y Tropas Especiales.
Previo a los carnavales, las fuerzas del orden público efectuaron una requisa inusual en busca de armas, en los terrenos y alrededores de la citada plaza, donde se asientan centros gastronómicos y de recreación. Varias fuentes aseguran que encontraron decenas de objetos punzantes, entre los que destacan cuchillos y machetes, ocultos en la floresta y rincones apartados.
Algunas de las armas incautadas le fueron ocupadas a ciudadanos que las portaban.
Este año hubo un aumento significativo de casos delictivos en la provincia, fundamentalmente de aquellos vinculados con la violencia. Aunque los medios oficiales no informan al público, en ámbitos gubernamentales se asegura que Cienfuegos ocupa el primer lugar en las estadísticas que reflejan la inseguridad ciudadana.
Fue por ello que la omnipresencia policial se hizo sentir en todos los ámbitos del carnaval creando sentimientos encontrados entre el público, que si bien por un lado dijo sentirse más tranquilo, por el otro dijeron padecer una sensación coercitiva.
“La verdad es que tenía miedo a salir, pero ahora que veo tantos guardias me encuentro más tranquila”, dijo Xiomara, enfermera del Hospital Provincial. “Yo por el contrario me siento incómodo”, comentó Leandro, esposo de Xiomara.
A pesar de las medidas adoptadas, Cubanet ha conocido de dos nuevos eventos violentos que se dieron por separado y culminaron con la muerte de uno de los involucrados, y heridas graves a otro.