MIAMI, Estados Unidos.- El gobierno venezolano estaría suspendiendo la estrega de alimentos a los ciudadanos que no le demuestren una completa lealtad, informa Diario Las Américas.
Los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), un sistema creado hace seis meses para “distribuir los alimentos directamente al pueblo”, dejarían de dar durante tres meses las bolsas de alimentos que facilitaban a sus beneficiarios en caso de que estos manifestaban su descontento con el gobierno de Miraflores.
Según reseñan medios de prensa, a principios de agosto pasado varios consejos comunales de Catia, de la capital venezolana, fueron convocados a una reunión adonde asistió el encargado de zona de las Unidades de Batalla Bolívar-Chávez así como una funcionaria de la Defensoría del Pueblo para “bajar los nuevos lineamientos a las comunidades”.
De acuerdo a una representante de uno de los consejos comunales, durante esa reunión se informó que desde el 1° de septiembre quedaban prohibidas las colas cerca del centro de expendio. El motivo es que los asistentes se quejaban del gobierno dentro de un comercio público, algo que no gustaba a gerentes y dirigentes afectos al oficialismo.
La funcionaria afirmó que las sanciones serían individuales y colectivas.
“Cómo se van a poner a hablar mal del gobierno en los espacios del Mercal”, dijo la funcionaria, quien “entiende” que “no quieran al gobierno”.
“Yo sé quiénes son de la oposión y no se les niega el beneficios”, afirmó, pero si la persona manifiesta su disidencia, “será suspendida por tres meses”.
Si la situación continúa, “será sancionado todo el consejo comunal” como medida colectiva.
Otro de los castigos es obligar a los beneficiarios a adquirir los productos en jornadas a cielo abierto, donde “no hay control ni temporalidad”, por lo que la situación puede ser “horrible”.
PDV-Mercal, la entidad encargada de distribuir los alimentos, “cambió las reglas de la compra”, según informa Diario Las Américas. La crisis de alimentos en Venezuela obliga a los ciudadanos a hacer grandes colas con tal de adquirir la comida, algo que puede costarles horas de espera.
La coordinadora de la Unión Nacional de Trabajadores, Marcela Máspero, destacó que en las reuniones del consejo comunal y en visitas casa por casa en su localidad, los oficialistas han amenazado con no entregar los alimentos a los que critiquen al gobierno.
Por otra parte, “en la comunidad de Parque Central, la directiva del consejo comunal da las bolsas a quienes muestren un pase expedido por el PSUV, y para que no se vea la cola, la distribución se hace en los sótanos de los edificios”, señaló Máspero.