GUANTÁNAMO, Cuba.- Desde el pasado 8 de marzo, ETECSA comercializa el servicio de correo electrónico mediante los teléfonos celulares, pero entrar a alguno de estos locales para realizar cualquier trámite se ha convertido en una pesadilla.
Sobre el acceso a Internet, éste se ha vuelto más difícil porque una vez hecho el contrato para revisar el correo electrónico desde un móvil es imprescindible configurarlo desde una de las máquinas, lo cual obliga al cliente a sentarse frente a una computadora. Pero el caso es que Guantánamo, una ciudad con más de 150 mil habitantes, sólo cuenta con nueve computadoras para este servicio y el de Internet, seis en el tele punto de Los Maceo y Aguilera y tres en el tele punto de Ahogados, entre 10 y 11 norte, siendo ésta la causa fundamental de las deficiencias que actualmente presenta el servicio de Internet aquí.
Con el objetivo de profundizar en el asunto, el lunes 14 de abril visité los tres tele puntos en horas de la mañana.
Calle Ahogados entre 10 y 11 Norte, Reparto Caribe
Aproximadamente las 9:20 a.m., pregunté en la cola sobre la causa de la demora. Irma López, profesora jubilada, me dijo que esta es la tercera vez que va en menos de una semana para hacer el contrato que le permita revisar el correo desde su móvil, y considera que el trabajo no está bien organizado.
-Ante la gran cantidad de personas que ha solicitado ese servicio, ETECSA debió tomar medidas para que la permanencia del público en las colas fuera mucho menor de lo que es-, dijo la señora López.
Una joven que se identifica como Yaíma coincide con López y dijo que ha venido cuatro veces y este es el día que menos personas ha visto haciendo la cola, por eso se ha quedado. -Sin embargo- comentó- no sé si me dé tiempo a realizar el contrato, pues llevo aquí más de 30 minutos, tengo todavía cinco personas delante y debo regresar a las 10 a.m. a la casa para darle una medicina a mi mamá.
Otro joven que se identificó como Pablo considera que el trato que ofrecen las trabajadoras de este tele punto es bueno, pero no se aprovechan bien las posibilidades de este local.
-¿Por qué?-, pregunté.
-Puedes comprobar que hay sólo tres trabajadoras atendiendo al público, una cobra la factura telefónica, otra vende bonos de recarga y la otra es la única que realiza los contratos para revisar los correos en los celulares, lo cual provoca esta cola-, expuso Pablo.
En Beneficencia y Paseo
Allí conversé brevemente con un joven que dijo llamarse José Lorenzo, trabajador por cuenta propia:
-Cerré mi lugar de trabajo para venir a comprar una línea de teléfono móvil, pero llevo aquí más de media hora y todavía tengo como cuatro personas delante”.
En Los Maceo y Aguilera
En este telepunto, el más amplio de los tres, cualquier ciudadano poco observador que llegue creerá que no hay cola, pero sí la hay, aunque no vea a nadie en el portal, porque ante la ausencia de un toldo, la cola se hace al frente, en la acera y portales de la tienda La Tijera.
Usando un subterfugio logré entrar al salón, donde la cola para pagar el teléfono es de quince personas y la del contrato para revisar el correo desde los celulares es de unas veinte. En otra cola, seis jóvenes esperan que una máquina se desocupe para acceder a Internet.
Al menos. ya estamos dentro, me dice uno que se identifica como Pedro Alain, estudiante de medicina, que esperaba desde hace cuarenta minutos para sentarse frente a una PC y configurar su correo.
Alina, joven artista, me dice que ella va a revisar su correo en ese tele punto, pues sus padres y dos hermanos viven en el extranjero.
-Antes iba a revisarlo en la casa de un particular que me cobraba menos, pero allí la conexión es muy lenta. Y termina diciéndome:
-El precio de la hora de conexión es muy caro y creo que los dirigentes de ETECSA deben hacer algo, pues Guantánamo necesita una sala de navegación más amplia y con muchas más máquinas.
Hablé con una trabajadora de ETECSA con la que tengo buenas relaciones y le informé sobre mis indagaciones. Ella comenta:
-Es cierto que desde que se comenzó a ofertar el servicio de correo electrónico a los móviles ha habido gran afluencia de público a nuestros tele puntos, sobre todo a éste, lo que ha creado dificultades a los clientes habituales de Internet, pues la configuración del servicio de correo electrónico en los móviles hay que hacerlo desde una de nuestras máquinas.
-¿Y qué posibilidad hay de aumentar el número de computadoras?
-Hasta donde sé, por el momento no hay ninguna- respondió sin permitir que su nombre trascendiera a la prensa independiente.