LA HABANA, Cuba, 17 de mayo de 2013, Dania Virgen García/ 173.203.82.38.- El pasado domingo 11 de mayo, Día de las Madres, el adolecente Daniel de Jesús Elías Matos, de 12 años de edad, se evadió del hogar de amparo filial 64, en Miramar, municipio Playa.
Según la fuente, que pidió no se mencionara su nombre, el adolecente tiene una crítica conducta antisocial.
Desde el fallecimiento de su madre, fue entregado a un hogar de amparo filial. Ha estado en varios otros hogares por sus problemas de conducta, pero se ha fugado de todos.
Actualmente anda en la calle, pidiendo dinero, comida, durmiendo en guaguas. Ha tenido varias peleas callejeras.
Su padre adoptivo, que le dio sus apellidos, es un ex convicto de la justicia, que según asegura la fuente, lleva prófugo varios años y se esconde en el barrio de Mantilla, perteneciente al municipio de Arroyo Naranjo.
El día en que se fugó Daniel de Jesús se dirigió a Atención a la Ciudadanía, situada en la Plaza de la Revolución, para quejarse que le estaban dando golpes, poca comida, que lo maltrataban, y que no le daban ropa ni zapatos.
Confirmó la fuente que es verdad que la comida que le suministran a los niños es mala y poca.
Este hogar del que se fugó Daniel de Jesús alberga muchachos con edades entre 6 y 18 años. Muchachos de pésima conducta perjudican a otros albergados que no poseen la misma conducta.
Según la fuente de información, el ministerio del interior y Educación, es quien tiene la culpa de que en estos hogares los internados no se clasifiquen, existen niños con conductas más críticas más que otros, que debían ser ubicados en la prisión de menores. También dijo que el gobierno interna a los niños sin ver las consecuencias en el futuro de ellos.
Muchos son delincuentes, drogadictos, ladrones, otros con delitos de robo con fuerza y violencia, asesinatos, lesiones, entre otros, que cometen delitos inculcados por los familiares.
Ejemplo de ellos son los hermanos Yordano y Osmany Fariñas Martínez, de 16 y 15 años de edad. Su madre fue presa por el delito de abandono al menor.
En los hogares filiales, los menores son maltratados y abusados por los muchachos mayores. La mayoría de estos niños salen con conductas antisociales, sin futuro para sus vidas, y sin estudios terminados.
En la Habana existen varios hogares de amparo filial, entre ellos el 37, 72, y el 83, todos en el municipio Playa.
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