MIAMI, Estados Unidos.- Más de $68 millones de dólares en cuatro préstamos concedidos a Cuba para las obras constructivas del Puerto del Mariel fueron declarados ilegales de acuerdo a una reciente auditoría judicial realizada por el Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU), informó el portal de noticias brasileño UOL.
El TCU, con sede en Brasilia, dictaminó que fueron ilegales los préstamos realizados por el banco estatal brasileño BNDES (Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social) y el Tribunal investiga ahora todos los desembolsos efectuados por el BNDES para obras ejecutadas por empresas acusadas de corrupción en el país sudamericano, como es el caso de la constructora Odebrecht, escogida por el gobierno cubano para la ampliación y modernización del Mariel.
En la investigación se confirma la injerencia del gobierno brasileño en la concesión de préstamos a Cuba, y pone en evidencia que no solo mediaron criterios técnicos en esta decisión financiera, lo cual facilitó la entrada de Odebrecht en los negocios con la Isla.
De acuerdo a la serie de reportajes de Martí Noticias “Los oscuros negocios de Odebrecht en Cuba”, hasta ese entonces era desconocido el destino de al menos $383 millones en inversiones para el puerto del Mariel que ponía en entredicho la presunta exportación desde Brasil de $802 millones de dólares en proyectos, materiales y equipos para la obra portuaria.
El artificio financiero autoriza, según la ley actual, a bajarle los intereses a los préstamos internacionales por un período máximo de 10 años. Sin embargo, para el puerto artemiseño el gobierno brasileño decidió extenderle a Cuba el descuento por 25 años. Es por ello que de haberse cumplido la legislación vigente, la disminución máxima de los intereses de la deuda cubana sería de $54,63 millones de dólares en 10 años, pero, con el alargue del período de concesión de ese privilegio a La Habana, el descuento saltó a $123,11 millones de dólares.
El órgano de control brasileño constató además que las condiciones ofrecidas por el BNDES a Cuba fueron mucho mejores que las del mercado internacional en aquel momento.
Los préstamos del BNDES a Cuba comenzaron en 2009, durante el segundo mandato del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010) y continuaron en el primer gobierno de su sucesora, Dilma Rousseff (2011-2016).
En total, el BNDES prestó $682 millones de dólares para la ampliación y modernización del Puerto del Mariel.
Los costos del megaproyecto en La Habana, inaugurado en enero de 2014 por la expresidenta Dilma Rousseff y el exmandatario cubano Raúl Castro, ascienden a $957 millones de dólares, según cifras oficiales, pero la manera en que fue empleado ese dinero se mantiene bajo total secretismo.