MIAMI, Estados Unidos. – El opositor matancero Armando Trujillo González, miembro del Movimiento Independiente Opción Alternativa, del municipio Pedro Betancourt, fue liberado esta semana, después de dos años y medio en la prisión de máxima seguridad de Agüica, en Colón, por el supuesto delito de robo con fuerza.
Trujillo González, quien se desempeñaba como cuentapropista (bicitaxero) hasta el momento de su arresto, contó a CubaNet que entró a prisión con 289 libras y salió con 170.
“Lo que viví ahí parece una historia de ciencia ficción”, señaló. “En tres años nunca tuve derecho a visitas, ni a jabas de comida. Me suspendieron el teléfono nueve meses”.
El opositor precisó que sufrió agresiones por parte de los presos y de los oficiales. “Me castigaban por cualquier cosa, por pedir mis derechos. Tras el 11 de julio estuve nueve días preso en una celda de máxima seguridad, de castigo. Me negaron los medicamentos y la dieta por padecer gota y ser hipertenso”.
Trujillo González precisó que fue condenado por, supuestamente, robar en un basurero, “donde habían cientos de gentes buscando materias primas”.
“Me acusaron de robarme un kilogramo de latas, tres cabillas, un pedazo de alambrón y un pedazo de acero níquel. La Seguridad del Estado fue allí, me arrestó y a las otras gentes las dejó. Dice que tenían un seguimiento conmigo por ser un elemento ‘contrarrevolucionario’”.
De acuerdo con su testimonio, los agentes de la Policía política le propusieron trabajar para los órganos de la Seguridad del Estado. “Yo les dije que no, que yo soy fiel a mis principios y mis ideas, y me metieron preso por eso. Me fabricaron esa causa (tres años por robo con fuerza) y me dijeron que me iban a maltratar tanto que iba a tener que ahorcarme”.
“Me echaron tres años del trabajo a la casa con la condición de que no podía ir a la sede de Opción Alternativa. Y a los cinco meses me recogieron hasta el día de hoy”.
El opositor precisa que lloró tras ser liberado y “salir vivo” de la prisión de Agüica. “Allí se le dan golpizas a los presos, son sometidos a vejaciones, maltratos, abusos”, denunció.
El acoso en su contra comenzó antes de ir a prisión, cuando se desempeñaba como bicitaxista, también precisó. “Una vez me alquilaron una carrera de cinco kilómetros y me abordaron varios agentes de la Seguridad del Estado buscando cosas que yo no tenía, como de res o baterías robadas, pero nunca pudieron probarme nada”, aseguró.
Recibe la información de CubaNet en tu celular a través de WhatsApp. Envíanos un mensaje con la palabra “CUBA” al teléfono +1 (786) 316-2072, también puedes suscribirte a nuestro boletín electrónico dando click aquí.