MIAMI, redacción.- “Cuba tiene mucho que mostrar al mundo. Nuestro país ha emprendido un camino para dinamizar su crecimiento económico, en busca de un futuro socialista próspero y sostenible”, dice el ministro de Comercio Exterior de Cuba, Rodrigo Malmiera al diario oficial Granma.
Uno de los espacios de diálogo fundamentales de la VII Cumbre de las Américas, en Panamá, es el foro de negocio, que se celebrará entre los días 8 y 10 de abril próximo. En este encuentro, organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo y el gobierno panameño, 18 cubanos compartirán sus experiencias acerca de las actuales transformaciones económicas que vive el país.
“Por eso, llegamos a Panamá haciendo justicia, con una América Latina y un Caribe fortalecidos”, remarcó Malmierca.
El titular del Mincex subrayó que van al foro de negocios con el objetivo de mostrar las posibilidades que Cuba ofrece para el desarrollo de las relaciones económicas internacionales, a partir de la aprobación de la Ley 118 de Inversión de Extranjera y de la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM).
Con respecto al embargo estadounidense, el ministro cubano recalcó: “Esa política de la Casa Blanca impuesta hace más de medio siglo, sigue hoy intacta. Las medidas dispuestas por Obama son incompletas e insuficientes, y no cambian la esencia de esa medida unilateral mantenida por el Gobierno estadounidense contra Cuba”.
Está claro que el embargo no se puede resolver de inmediato, pero sí constituye uno de los pasos fundamentales para lograr la normalización de los vínculos entre los dos países, aseguró Malmierca.
Respecto a los potenciales inversionistas estadonidenses en Cuba, el titular del MINCEX dijo: “Todos los empresarios del mundo tienen el mismo tratamiento en la Ley 118, y por tanto, similares oportunidades de inversión”. Sin embargo, los estadounidenses poseen un grupo importante de limitaciones para establecer negocios con Cuba, establecidas por su Gobierno, no por nosotros, apuntó.
“Los empresarios estadounidenses disfrutarán del mismo tratamiento que el ofrecido a los del resto del mundo que hoy mantienen vínculos con la Isla. Es cierto que vemos con buenos ojos —cuando las leyes norteamericanas lo permitan—, que ellos puedan comerciar e invertir; pero eso no implica un trato preferencial”, explicó enfatizó Malmierca.
Para que la economía nacional crezca a tasas más dinámicas, requiere que los niveles de acumulación de capital sean superiores al 20 % y no al 12 % actual. Esto solo es posible a través de dos vías: el acceso a créditos financieros a largo plazo y el fomento de la inversión extranjera directa, concluyó Malmierca.