MIAMI, Estados Unidos. – La nueva lista de presos políticos publicada este jueves por la organización no gubernamental Cuban Prisoners Defenders (CPD) no ha sentado bien a la plana mayor del régimen castrista, razón por la que la ONG ya ha comenzado a reportar dificultades en su labor de documentación.
De acuerdo con CPD, en la Isla hay unos 4000 los presos políticos. A muchos de ellos ya se les ha notificado que habrá represalias si colaboran con el inventario que hace la ONG.
“Varios presos políticos en Cuba recibieron, hecho insólito hasta ahora, la orden de que, si se comunican con Iván Hernández Carrillo, uno de los fundadores de CPD, eso les supondría perder las llamadas durante un año, a familiares incluidos”, denunció la organización, que participa en la defensa activa y metodológica de los activistas de derechos humanos en Cuba.
En ese sentido, CPD denunció represalias del régimen contra los ciudadanos Yosvany Socarrás González y Félix Juan Cabrera. “A este último le han prohibido incluso hablar hasta con su familia por teléfono como castigo”.
La entidad también notifica que, pese a las diversas liberaciones por término de condena o eliminación de pena en el mes de abril de 2019, la última lista de presos políticos pertenecientes a la oposición ha vuelto a experimentar un crecimiento.
Asimismo, la ONG expresó su preocupación el número de convictos y condenados con “Peligrosidad Social Pre-Delictiva”, el cual, según estudios de población carcelaria, asciende a varios miles.
Cuban Prisoners Defenders (CPD) es reconocida como la organización que presenta la lista de presos políticos adoptada mayoritariamente por los países democráticos con representación diplomática en Cuba.