MADRID, España.- El Parque Deportivo José Martí, una de las instalaciones más céntricas y emblemáticas de la capital cubana, ha sido testigo de décadas de historia deportiva y social en la Isla. Sin embargo, su estado actual, como el de tantos centros de este tipo en el país, refleja un triste abandono que contrasta con su pasado.
![](https://www.cubanet.org/wp-content/uploads/2024/03/2-1-1024x683.jpg)
Inaugurado en la década de 1940 durante el mandato de Fulgencio Batista y remodelado en 1960 por el arquitecto cubano Octavio Buigas, el Parque Deportivo José Martí fue en su momento una de las instalaciones deportivas más completas de Cuba. Situado en El Vedado, en la intersección de la Avenida Malecón y la Avenida de los Presidentes, el parque abarca una amplia área que incluye un gimnasio, piscina, un estadio, espacio de estacionamiento y un parque infantil.
Destacaban su tabloncillo para baloncesto y vóleibol, así como el estadio, con capacidad para 3.150 personas, que presenta una cubierta ligera en forma de bóvedas de cascarón.
![](https://www.cubanet.org/wp-content/uploads/2024/03/4-1-1024x683.jpg)
En 1991, el complejo deportivo recibió una reparación con motivo de los Juegos Panamericanos, específicamente para las competencias de balonmano. Sin embargo, después de estos juegos el complejo entró en un declive gradual.
En el año 2000, un dictamen técnico de la dirección de Higiene y Epidemiología de Salud Pública de la capital, en colaboración con la dirección de Construcción, determinó el cierre de la instalación debido al peligro de derrumbe de varias áreas de gradas y al mal estado general del lugar.
Se previó la recuperación del parque por etapas, comenzando con la reparación de las piscinas y las gradas. Sin embargo, la remodelación quedó estancada por falta de financiamiento e interés gubernamental.
![](https://www.cubanet.org/wp-content/uploads/2024/03/1-2-1024x683.jpg)
En 2017 se iniciaron algunas obras en las cercas perimetrales, pero el estado de abandono del parque siguió siendo evidente.
En marzo del año pasado, se anunció la reparación de las gradas del complejo deportivo; una visita reciente de CubaNet al lugar revela que poco o nada se hizo. Imágenes recogidas por este medio muestran una piscina llena de agua estancada, aros de baloncesto oxidados y un deterioro general que contrasta con el esplendor que alguna vez tuvo.
![](https://www.cubanet.org/wp-content/uploads/2024/03/3-1-1024x683.jpg)