MIAMI, Estados Unidos.- Dos senadores republicanos han presentado la pasada semana un proyecto de ley que propone eliminar la lotería de visas, recortando a la mitad el número de inmigrantes legales que llegan a estados unidos durante la próxima década, informa The Guardian.
La legislación representa el más reciente esfuerzo del ala populista del Partido Republicano asociada a la ideología de Donald Trump de alejar la ideología de esa formación política de las preocupaciones de los grupos de negocios.
La llamda Reforma de la Inmigración Estadounidense para el Empleo Fuerte, apodada “Raise Act”, alteraría el sistema de inmigración de los EE.UU. para reducir significativamente el número de extranjeros admitidos en el país sin una visa basada en sus habilidades, algo similar a lo que ya aplican países como Canadá o Australia.
Con la ley, terminarían las preferencias de tarjeta verde para padres adultos hermanos o hijos de ciudadanos estadounidenses. En cambio, las preferencias sólo se mantendrían para los cónyuges y los hijos menores de edad.
La legislación también eliminaría la lotería de visas de diversidad, que en la actualidad asigna 50 000 visas a residentes de países de los que no proviene un número significativo de inmigrantes a los Estados Unidos, y limitaría el número de refugiados que se les ofrece residencia permanente a 50 000 anualmente.
En una estimación presentada por Cotton, este proyecto de ley reduce la inmigración general a 539 958 al año en una década, casi la mitad del total de 1 051 031 admitidos en 2015.
Cotton sostuvo que el crecimiento de la inmigración legal en las últimas décadas había llevado a una “fuerte disminución de los salarios de los trabajadores estadounidenses” y que su proyecto representaba un esfuerzo para trasladar a Estados Unidos a un sistema más basado en el mérito.
Pero la senadora Jeanne Shaheen, un demócrata de New Hampshire, dijo que el proyecto de ley “envía un terrible mensaje al resto del mundo y es incuestionablemente un asesino de trabajos”.
“Como nación de inmigrantes, este proyecto de ley va en contra de nuestros valores”, dijo Shaheen en un comunicado. “Los hechos son claros: los inmigrantes contribuyen en gran medida al espíritu emprendedor de nuestro país, estimulando el crecimiento del empleo en New Hampshire y en todo el país. Cortar exitosos programas de visas y separar innecesariamente familias de inmigrantes es simplemente incorrecto y sin sentido”.
Aunque la Casa Blanca no ha sopesado la legislación, Cotton dijo a periodistas que había discutido el proyecto de ley con Trump como “un concepto” y que Trump “apoya firmemente el amplio concepto de mover nuestro sistema legal de inmigración hacia un sistema basado en el mérito”.
Cotton argumentó que su legislación representaba un retorno a las normas históricas de inmigración, pero criticó fuertemente las comparaciones con la política de inmigración de 1924-1965, que impidió que muchas personas ingresaran al país. Desestimó las preocupaciones de limitar la migración familiar a Estados Unidos y argumentó que la preocupación de que las familias se separaran bajo la nueva ley “la mira de la manera equivocada. Lo que es bueno para el extranjero, no lo que es bueno para el ciudadano estadounidense”. Cotton añadió: “Yo siento por mi prójimo, pero sirvo a mis conciudadanos”.