LA HABANA, Cuba. -Las bienales crecieron en artistas participantes, salieron de las sedes tradicionales como el Centro Wifredo Lam, el castillo de La Cabaña y el Museo de Bellas Artes, y se han extendido por La Habana metropolitana al poblado de Casablanca del otro lado de la bahía, el Parque Trillo, el Barrio Colón, la Habana Vieja, hacia galerías y espacios privados en el Vedado y Playa, principalmente. La XII Bienal de La Habanas coincide con el excitante ambiente de vivir el momento único del viraje en la historia de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, a punto de culminar las negociaciones para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y la elevación al rango de embajadas de las secciones de intereses. Los organizadores del gobierno han logrado amplia participación de artistas cubanos, cubanoamericanos, norteamericanos, latinoamericanos, caribeños, europeos, asiáticos y africanos, y el éxito de público extranjero por el incremento de los visitantes atraídos por los nuevos acontecimientos.
Más allá de los tradicionales espacios y consagrados artistas, se abren paso nuevos talentos, sin que esto signifique la apertura total al control estatal de la participación nacional, fundamentalmente de arte contestatario. El maestro Manuel Mendive, Premio Nacional de Artes Plásticas, realizó su tradicional Performance en las calles de La Habana Vieja, y recibió la condición de Doctor Honoris Causa de la Universidad de las Artes (ISA). Las obras de su exposición Energía para el Amor y la Bondad, en la galería Víctor Manuel de la Plaza de la Catedral, pueden comprarse una pintura con palomas por 80 000 dólares o un cojín por 35 000 dólares.
En la Bienal se ha destacado el primer proyecto colectivo de 15 artistas de la isla y norteamericanos “Entre, Dentro, Fuera/Between, Inside, Outside”, en el Pabellón Cuba del Vedado. Una novedad en ese marco es el proyecto de Levi Orta: “Capital=Cultura. ¿Interesado en invertir en los nuevos negocios de la cultura cubana?”. Se trata de una bolsa de negocios, que se inició con propuestas de 21 artistas –emprendedores, y en 3 días ya llegaba a 50 cubanos solicitantes y unos 30 extranjeros interesados en invertir. Una planilla para la iniciativa comercial cubana y otra para el inversionista potencial están disponibles en un stand amablemente atendido. Esta iniciativa autorizada puede contribuir al desarrollo de la actividad por cuenta propia al extenderse a paladares y otros servicios que se relacionen de alguna forma con la cultura, así como abrir espacios para otros negocios de cubanos, carentes de capital e insumos para empezarlos.
La irradiación hacia la población se ha incrementado con cada bienal, lo cual resulta positivo. En Cuba, la mayor parte de la población no asiste a los museos, galerías y teatros. Los niños no tienen programaciones de visitas grupales de las escuelas u orientadas como actividad extracurricular. Los padres y otros familiares no tuvieron costumbre o la perdieron agobiados por las dificultades cotidianas, entre ellas el transporte. A pesar de la gran propaganda sobre la Feria del Libro cada año, las bibliotecas escolares están destruidas y son escasos los libros, o no existen. De manera que no hay hábito de lectura e investigación, ni libros de arte. Las escuelas iniciaron cursos de computación hace años, pero carecen de acceso a Internet al igual que los hogares.
Las atractivas esculturas e instalaciones en el Malecón habanero y otros lugares incentivan a grandes y chicos, pero solo permanecen mientras duran las Bienales. Los proyectos de algunos artistas de extenderse hacia las comunidades donde radican sus talleres y galerías podrían contribuir al desarrollo intelectual y artístico a través de cursos desde tempranas edades, asi como incentivar a jóvenes que pasan horas jugando dominó y bebiendo ron en las esquinas, al igual que sus mayores, porque instrucción no es educación y cultura, y debido a la falta de entretenimiento en los barrios de las ciudades, incluida La Habana, y los poblados.
La XII Bienal comenzó el 22 de mayo y durara un mes, de manera que habrá mucho que comentar hasta su conclusión.