LA HABANA, Cuba, 18 de junio de 2013, Julio César Álvarez/ www.cubanet.org.- Un hueco abierto y abandonado hace un mes por la empresa Aguas de La Habana funciona como improvisada piscina para niños, en el barrio capitalino de la Víbora.
“La piscina de Milagros”, como se conoce a este bache monstruoso, se ubica en la calle de igual nombre, en el municipio 10 de octubre.
Tiene su origen en las labores de remiendo que lleva a cabo la empresa Aguas de La Habana en la conductora (viaducto) que pasa por debajo de la calle.
Dicha conductora es una gruesa tubería instalada en la década de los 80. Varios municipios de la capital se abastecen de ella.
El deterioro de la misma “hace aguas” en múltiples lugares a lo largo de su recorrido. Según los vecinos, este hueco, ubicado en las calles Milagros y Felipe Poey, lo han abierto las brigadas de reparación en 13 ocasiones en menos de dos años debido a una rotura recurrente.
La improvisada piscina se abastece de la rotura abandonada. También lo hace del agua que baja de las averías que están calle arriba, y del torrente que crean las lluvias.
El evidente peligro para la vida de los niños, como se aprecia en la foto, parece ser de absoluta indiferencia. Como mínimo, el socavón debería estar vallado y señalizado.