LA HABANA, Cuba. –La Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) no logra cubrir la gran demanda de acceso a Internet en Cuba. A pesar del elevado costo de la conexión (alrededor de 4,50 dólares la hora), las salas de navegación se encuentran llenas y con largas colas para acceder al servicio. En Ciego de Ávila, el pasado 21 de febrero se inauguraron 5 nuevas salas y ETECSA ha implementado el servicio en varios Joven Club de Computación pero esto es muy poco para satisfacer la demanda. El servicio en las salas de Nauta a pesar de ser caro y censurado, es la única opción para la mayoría de los cubanos que quieren conectarse a la red de redes.
Nos acercamos al Telepunto ubicado en el edificio Focsa, en el Vedado, La Habana, para recoger opiniones al respecto.
Jorge Hernández, un joven que se encontraba en espera para acceder al servicio, nos comentó: “Llevo aquí 4 horas esperando para poder revisar mi correo electrónico de Gmail. Es la única forma que tengo de supuestamente navegar en internet y de buscar algo de información. Sé que todos los sitios que visito se quedan almacenados en una base de datos con mi nombre y mi número de carnet de identidad. Por eso me limito a entrar en sitios que no hablen de política ni de nada que vaya en contra de este gobierno. Este internet que ofrece ETECSA no solo es el más caro del mundo, también es el más censurado”.
El personal que trabaja en dichas salas no cuenta con la preparación requerida para brindar asistencia a quienes desconocen o nunca han navegado en Internet. Esmeralda Soler Flores, de 48 años de edad, que recién terminaba de navegar nos comentó. “Primera vez que vengo a navegar en Internet. El servicio me parece pésimo. Yo solamente quería buscar algo de información de temas que me interesan y también chatear un poco con familiares que tengo fuera de Cuba. Pero el personal que trabaja aquí para nada está preparado. Le pregunté algunas dudas a la persona responsable del local y no supo aclarármelas”.
A muchos de estos trabajadores de ETECSA encargados de administrar dichas salas de navegación simplemente se les asignó la tarea, sin que pasaran ningún tipo de adiestramiento para ello. Algunos, como es el caso de Tania López, simplemente fueron trasladados de su puesto de oficinista para una sala de navegación. “Nunca había navegado en internet. Ya, con el paso de los meses he aprendido bastante, pero no me han dado ningún tipo de capacitación. Lo mismo pasa con las compañeras que trabajan configurando los correos de Nauta en los móviles de la población. Nos tenemos que apoyar en jóvenes que están casi siempre fuera de nuestro local y se ganan la vida configurándoles los correos a los clientes a un precio de 2 dólares. Nosotras les mandamos los clientes”.
“Soy informático y vengo aquí porque no me queda otra opción. El que más o menos tenga un poco de conocimiento se da cuenta que esto es una estafa. Cobran carísimo por una horade conexión, a una velocidad de descarga súper lenta (45 kb/s); esas tarifas son un robo. Además hay que invertir hasta 4 horas de cola para poder entrar. Otro problema es que todo lo que hagas puede ser usado en tu contra. Cuando compras la tarjeta, los operadores ingresan en una base de datos tu nombre, número de carnet de identidad y lo asocian con el número de la tarjeta que contiene tu usuario y contraseña. Eso quiere decir que todo lo que se haga en tu sesión quedará registrado en la base de datos de ETECSA, todo lo que escribas, los lugares que visites e incluso tus contraseñas y tus contactos, toda esa información personal la podrán manejar posteriormente y si es necesario la usarán en tu contra”, nos confesó un joven, que prefirió permanecer en el anonimato.
La mayoría de estas salas de navegación de ETECSA cuentan con unas pocas computadoras con acceso a internet (de 4 a 8 en total). El tiempo de espera en las largas colas puede llegar hasta 4 horas. El Internet de Nauta no solo es caro, también es censurado y restringido.