SANTIAGO DE CUBA, Cuba. – María recibió la semana pasada un celular de la marca Blu Grande 5.5 a través de su hija, que actualmente reside en Surinam. Sin embargo, para sorpresa de la señora, vecina del reparto Vista Hermosa en Santiago de Cuba, su nuevo móvil no funciona en la frecuencia de 900 MHz, especificación técnica indispensable para conectarse a la red 3G en la Isla.
“Mi hija me mandó un teléfono, es bueno, pero no sirve para conectarse desde la casa, y no estoy para conectarme en la WiFi, donde uno ni puede hablar con tranquilidad. La pobre me dijo que me lo mandaba para que me conectara con ella y mira, ahora otro brete para poder conectarse”, señaló la señora mientras aguardaba para entrar a la oficina comercial de la Empresa de Telecomunicaciones (ETECSA), ubicada en el Callejón del Carmen.
Casi renunciaba la señora a la espera en la cola cuando un joven le susurró al oído: “seño, no busque más, nosotros le solucionamos el problema para que usted se pueda conectar”. Quizás impulsada por la angustia de la desconexión o el desespero por las horas que transcurrían a causa de la morosidad de la oficina comercial, la señora siguió al desconocido joven, quien pretendía remediarle el inconveniente.
Desde el inicio de la implementación de los datos móviles en Cuba, la venta de celulares con las prestaciones que garantizan la conectividad 3G se ha disparado en los principales sitios de compra y venta en la Isla. Muchos no buscan marcas, colores ni características especiales, solo que “funcione en la 3G”. Pero otros se han quedado confinados al uso de los más atrasados dispositivos, algunos por no tener los recursos para cambiarlos y otros que, por desconocimiento y poca información, han adquirido terminales que no compatibles con la tercera generación.
Sin embargo, Alfredo, quien trabaja como reparador de teléfonos móviles, asegura que “todo no está perdido”, ya que, para conectarse a la red de datos móviles, solo es necesario que ETECSA “reconozca el número del IMEI propio de cada teléfono, donde está insertada la tarjeta SIM y que este funcione en los 900 MHz”, para que envié un mensaje a dicha SIM, autorizando que ya está apto para el uso de la 3G.
Por tanto, la solución para María sería, precisamente, insertar su línea celular en un teléfono compatible con la 3G, y tras la llegada del mensaje de Empresa de Telefonía Cubacel, extraer y colocar nuevamente la SIM en su teléfono con prestaciones 2G.
Con estos movimientos “ya el usuario puede disponer de la compra de los paquetes de navegación y conectarse a internet”, dice Alfredo, aunque advierte que esta conexión sería más lenta, pero suficiente para navegar, chatear y hacer video llamadas “en horarios no pico”.
En los últimos meses esta nueva solución se ha convertido un negocio lucrativo para quienes se dedican a reparar terminales móviles en Santiago de Cuba, los cuales cobran 5.00 CUC por un servicio que se convierte en la salvación de aquellos que no alcanzan a obtener un teléfono celular con las exigencias de ETECSA.
“No es que abusemos, pero los conocimientos los tenemos nosotros y solo cobramos por ellos. La gente anda como loca, porque quieren conectarse a Internet y si no tienen dinero para comprar un teléfono nuevo, su mejor opción es nuestro servicio por solo cinco pesos”, alega un trabajador del taller de reparaciones móviles “Elephone”, ubicado en la calle Enramadas.
Entre tanto, ya se comienzan a instalar las primeras radiobases celulares en Santiago de Cuba, las cuales comenzarán a ofrecer en un inicio conectividad 3G y próximamente en 4G LTE.
Según un trabajador de ETECSA que trabaja en la instalación de estas microcerdas, “la función principal es descongestionar un poco la 3G, porque las antenas que se instalaron no dan abasto ante la demanda y estas más pequeñas aliviarían un poco el tráfico en el centro de la ciudad. Además, ya están preparadas para cuando se conecte la provincia a la 4G, lo cual será un logro considerable”.
Pese al avance tecnológico de los últimos años, miles de personas siguen sin la posibilidad de obtener un teléfono celular o de cambiar el que ya tienen. En ese sentido, ETECSA dio a conocer que, de los 5.4 millones de SIM activas en el país, solo el 37% alcanza a conectarse en la red de datos celulares, y solo un 7% de estos genera un tráfico superior a los 2.5 GB. Ello muestra que, de cierta forma, Cuba sigue desconectada.